El número de fraudes bancarios a través de la red aumenta año tras año. Ser víctima de uno de estos fraudes puede representar que se realicen pagos desde las cuentas bancarias de las cuales se disponen. Habitualmente son cantidades pequeñas, pero que se repiten de manera continuada si no se ponen medidas, y es muy dificil detectar el orígen del problema. Por esto, seguir una serie de medidas de seguridad básicas ayudará a minimar el riesgo de convertirse en la víctima de uno de estos fraudes.

Una de las medidas básicas es mantener el programa de antivirus actualizado, tener programados análisis de manera periódica y asegurarse de que no existen infecciones. Complementar con programas antiespía también es una medida efectiva de evitar que se nos instalen troyanos, gusanos y otro tipo de infecciones que pueden proporcionar a los atacantes nuestros datos personales, incluidos los bancarios. Evitar descargas de software sospechoso y vigilar el spam que nos llega también será importante para mantener límpio nuestro ordenador.

Hablando de correos electrónicos, nunca hacer caso a los mails que supuestamente nos llegan de nuestro banco solicitando los datos de nuestra cuenta. Los bancos NUNCA nos piden datos personales a través del correo electrónico. Además, asegurarse de que la conexión a las webs de estos bancos se realiza a través del protocolo seguro: https. En el caso de de encontranos con el protocolo estándar, http, desconfiar, es fácilmente vulnerable y un atacante podría obtener nuestros datos, así que mejor notificar a la entidad bancaria de que su web no usa ese protocolo. Hay que vigilar que este protocolo exista también a la hora de realizar cualquer compra on-line. Las tiendas on-line o e-commerce deberían usar también este protocolo para darnos más seguridad en la transacción comercial.

Las redes Wi-Fi, especialmente las que son públicas, o las privadas con una encriptación débil son habitualmente agujeros de seguridad. Cuando estés usando este tipo de conexiones no te conectes a lugares comprometidos y evita por todos los medios entrar a webs bancarias. Si usas el ordenador de otra persona, aunque sea de confianza, evita también este tipo de conexiones. Los datos se quedan almacenados en memoria y con un poco de habilidad podrían obtenerse. De la misma manera, nunca reveles tus contraseñas ni datos de acceso. Además usa claves con cierta complejidad e intenta modificarlas de manera periódica.

Y como siempre, usa tu sentido común!

Saludos