El calor es el peor enemigo de la tecnología. La mayoría de equipos tecnológicos e informáticos se funden si su temperatura llega a ser demasiado elevada. Cuanto más uso les damos, más se calientan. Habéis tocado vuestro teléfono después de haber hecho servir durante un rato el GPS? O el portátil, tras estar un rato con él sentado en el sofá? A mayor uso, mayor temperatura adquieren.

Lo que es básico, especialmente para los equipos informáticos, es que los sistemas de refrigeració ventilen. La mayoría de los ordenadores tienen una refrigeración por aire, a través de sistemas de ventilación. Existen modelos con refrigeración líquida, pero no son tan habituales en el mercado debido a su elevado coste. Por lo tanto, si tenemos un ordenador que dispone de ventiladores, hay que asegurarse de que estos están limpios. Es habitual que en las rejillas de ventilación se acumule polvo y pelusa, lo que provoca, que a medio plazo, se obstruyan los conductos de ventilación. Si esto sucede, el equipo no refrigera igual de bien, y se corre el riesgo de que nuestro hardware sufra daños irreversibles.

También nos podemos encontrar con el caso de que el polvo genere falsos contactos entre los componentes electrónicos, e incluso en los conectores de las diversas piezas que forman el ordenador. Por todos estos motivos es primordial que nuestros ordenadores esten lo más limpios de polvo y pelusa posibles, especialmente cuando el termómetro sube. Solo se deben seguir unos pequeños consejos básicos para la limpieza, que son los siguientes:

• Siempre que vayas a limpiar, asegúrate que el equipo está apagado y desconectado de la alimentación eléctrica
• En la medida que puedas, ponte en un lugar abierto y ventilado
• Si dispones de un aspirador, con cuidado, quita todo el polvo y la pelusa que puedas. Si usas un pincel pequeño para levantar el polvo más pegado te será de gran ayuda
• Para la suciedad más pegada lo ideal es soplarle aire. Pero si lo haces tu acabarás agotado. Lo ideal es disponer de un pequeño compresor para limpiar con aire comprimido. Si no dispones de él, no pasa nada, existen opciones más económicas en el mercado. En las tiendas especializadas de informática venden unos botes de aire comprimido. Puedes usarlos para esta limpieza.
• Revisa y renueva periódicamente el estado de la pasta térmica entre el procesador y el ventilador de CPU. Si se queda seca, la temperatura de la CPU subirá mucho! Si no sabes cómo hacer esto, pide ayuda a alguien que sepa ;)
• Haz especial hincapié en que los ventiladores y los disipadores queden limpios de polvo y pelusa.

Verás como cuando hayas terminado tu ordenador baja la temperatura (puedes controlarla con programas como speedfan, entre otros). Si tus ventiladores hacían ruido, es probable que ahora no sean tan ruidosos. Aasí que, disfruta del calor, pero con precaución!

Un saludo